REMO

Las máquinas de remo son las grandes olvidadas tanto en gimnasios caseros como en los gimnasios profesionales, y sin embargo es el mejor trabajo cardiovascular que se puede hacer por los siguientes factores:

•     Es un trabajo de bajo impacto articular: no existe tensión sobre las articulaciones ni sobre los tendones.
•    Se realiza un trabajo físico muscular de alta intensidad tanto del tren superior (brazos, antebrazos, hombros, espalda), como del tren inferior (gemelos, cuádriceps, isquiotibiales).
•   Puedes adaptar las pulsaciones con el número de paladas o con la resistencia que pongas en la máquina.

Si tiene tantas ventajas ¿Porqué no está más extendido su uso? Sinceramente no lo sé. Me puedo imaginar en que no se utilice tanto como las bicis o las cintas de correr ya que no es fácil coger una piragua e irte a un río, a un canal o al mar a pegar unas paladas, y mucho menos a hacer remo en banco móvil (a no ser que vivas en Sevilla) o en banco fijo (las traineras). Además un buen remo para uso casero sale caro, ya que un remo decente de tiro central es difícil que te baje de 800 euros, y por ese precio puedes comprarte la bici y la elíptica.

Remo de tiro central: su longitud es grande para espacios pequeños

No obstante sí pueden existir alternativas. Os acabo de nombrar el remo de tiro central, que es el que se ve en los gimnasios. Existen remos cuya resistencia  es mecánica por fricción, y otros más profesionales en los que la resistencia te la da el agua que contiene un depósito: water row Es una pasada, pero a no ser que tu gimnasio casero sea muy grande y tu cuenta corriente esté muy saneada, es un despropósito.

 Para uso casero se puede optar por los remos escandinavos o remos latinos, que por poco más de 100 euros te pueden dar un trabajo complementario tras tu rutina de entrenamiento muscular o a una rutina de cardio con comba.

Remo escandinavo